EL MONSTRUO DEL 15-M
Irene Montero, la psicología del 15-M, esto es: su ansiedad, su paranoia, su Eros, su Ello, su Tánatos, su pulsión onírica, su sublimación, su psicosis, su complejo de inferioridad, su Súper Yo, su inconsciencia, su angustia, su Ego, su ilusión óptica, su transferencia, su salud mental, su manía persecutoria, su delirio de grandeza, su sonambulismo y su psicopatología de la democracia cotidiana. Todo junto. PODEMOS. El único súper robot que hemos sabido construir contra los Mazingers del Fascismo y del Capitalismo Suicida. Un monstruo infantil y voluntarioso al que le estamos enseñando kárate teórico entre todos para cuando llegue el día del gran combate en dibujos animados. Un monstruo como para darle de hostias a menudo por sus salidas de niñato... Y otras por inocente... Pero es nuestro monstruo, estamos criándolo sin manual de pediatría para Espartacos Bebés, y lo adoramos. Irene Montero es la que está intentando que verbalice sus sentimientos en público (arriba, en una de sus clases de logopedia). A veces lo consigue. No es poco para la edad que tiene. Digo el robot.
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