viernes, 21 de noviembre de 2014

LOS TEMPLARIOS DEL TOCAMIENTO


De cabrón, cabrones. Y de Roma, "Romanones". "Los Romanones", la secta cristiana de curas pedófilos con implantación en Granada por la que se ha interesado el Papa Francisco personalmente. Los Templarios del Tocamiento. Y en lugar de iglesias-fortaleza, chalets-to'confort. Organizados, disciplinados, irreductibles, todopoderosos y en activo. En tiempos, como los moros de la Axarquía, pero oliendo a colonia. Y como tales, violando a todo monaguillo cristiano que apareciera por sus riscos de Armani. El actual Boabdil el Chico de la zona, el arzobispo de Granada, dice que no tiene nada que ver con los Ab Usos (nombre en árabe de la secta), que le duele el asunto por lo que le atañe (a saber cuánto le duele, si más o menos que al violado, y a saber cuánto le atañe o "le implica") pero que a saber si es verdad finalmente (la gente es muy mentirosa cuando la viola un cura) y que al chaval que denunció las romanonadas le están haciendo la vida imposible con tanta información y tanta llamadita del Papa. Francisco Javier Martínez,  el arzobispo ultraconservador, homófobo, misógino y más místico que un champú para sordos, le dijo en su momento al violado que se callara y que se resignara, que el asuntillo suyo ya estaba en manos de la Virgen María... Joe Ramone no las cantaba tan drogado como este Javi Romanone, que si no pertenece a la banda, deberían ficharle. O Los Templarios del Tocamiento o la policía. Para que cante cobrando. Y con la Virgen María de groupie, si acaso. Lo mismo que los otros van a acabar pagando por tocar. De malos que son. De hijoputas que son.