viernes, 27 de octubre de 2017

LA BANCA SALIVA


Probablemente haya más ladrones del lado de los fascistas mentirosos, manipuladores y corruptos del gobierno español que del lado de los señoritos corruptos, mentirosos, manipuladores, plutócratas y timadores del Gobierno catalán, pero los responsables de ir de un lado a otro con un cóctel molotov son los que llevan de un lado a otro un cóctel molotov y algún eslogan romántico, librepensador y dicharachero. Hasta su nombre es de cuento de los Hermanos Grimm: Candidatura de Unidad Popular. La CUP. Creo que barajaron otros nombres antes: Ofrecimiento Sinuoso de Amaneceres. Propuesta de Meriendas Ricas. Ternura Hacia las Cosquillas. Independencia para los Dependientes y para los Recepcionistas de Noche. Amor, Qué Te Diría Que Te Encendiera de Pasión... Lo malo de ir con un libro de Bécquer por ahí para hacer política es cuando te sale un hijoputa iletrado (como Rafael Hernando no, lo siguiente) y te arranca el libro y la cabeza de un tarrazo. O eso o ves arder a tu espalda todo lo que más querías y nadie te ha enseñado ni a llevar un cubo con agua ni, por supuesto, a respetar a los que hacen cubos, a los que saben donde está el agua, y a los que saben cómo NO provocar incendios porque no piensan como tú. Arriba, Ana Gabriel, de Somos Maravillosos o Lo Seremos Algún Día, bastante fastidiada hoy y también por el día de mañana, no sea que en un futuro aparezca en los libros de historia como el dibujo animado que se puso a jugar a la independencia flamígera de sus juguetes sin contar con que los demás también tenían juguetes y hasta mecheros más gordos que su cóctel molotov de la Señorita Pepys. Qué asco de metáforas y qué asco de todo. Entre los asesinos, los ladrones, los señoritos, los timadores y los descerebrados estamos dale que te pego a Cataluña mientras los trabajos no dan para vivir, los abuelos se quedan sin medicinas y la Banca saliva y reluce como el sol sobre nuestros cadáveres.