jueves, 5 de marzo de 2009

OTRO RETRATO ANTIQUÍSIMO

Este pobre retrato fue devuelto a toriles; vamos, que me comí su "importe" con patatas. La chica no "se veía". Su novio sí. Sus amigos sí. Todo el mundo sí. Hasta yo sí. Pero ella no. Sesenta euros en el limbo de la presunción y el relativismo femeninos. Caramba con la moza, que en un año que lleva el retrato pintado no ha hecho más que alejarse del modelo. Lo que tiene no asumirse. Ah, y envejecer.