lunes, 12 de septiembre de 2011

APURANDO LA ALEGRÍA, ALMACENÁNDOLA

Qué difícil es encontrar chicas normales en internet. La mayoría de ellas está en la actitud "soy la última cocacola del desierto", cuando no, directamente, en la actitud "voy a coger a tu hermano pequeño (el de cada cual) y me lo voy a comer con cuchillo y tenedor". Internet es un puto mercado de carne al peso. Por toneladas. Es que no se puede pintar un pan sin que te lo enseñen con tetas y una webcam, joder... A lo que íbamos. Alegría y cuerpos serranos en la playa. Ampliando la imagen se aprecia mejor el buen rollo. Porque todavía hay verano para rato. Alegría, sacos de tierra y palas... ¡Y que viva el sol que iluminó la defensa de Madrid en el otoño del 36! Ese erotismo épico contra los fachas. Nos va a hacer falta.