jueves, 30 de noviembre de 2023

A PROPÓSITO DE HENRY



A Henry Kissinger se le había olvidado morirse hasta que su cuerpo se lo recordó ayer a los cien años largos. Un tiempo de vida que le sirvió para recibir el prestigioso premio nobel de la paz por conseguir un alto el fuego en la guerra de Vietnam que prolongó paradójicamente el conflicto dos años más (un figura de la diplomacia internacional paradójica) o por incentivar el pisoteo de los derechos humanos en la dictadura de Pinochet que él mismo auspició con entusiasmo o por el fomento humanitario de la tortura en la democrática labor de los militares argentinos durante la sanguinariamente pacífica dictadura de Videla, por ejemplo. Ah, también fue uno de los impulsores intelectuales (mamporreros) de la Operación Cóndor (llamarla Operación Águila Calva Norteamericana Con sus Garras en toda América Latina les pareció demasiado explícito) durante ese período de tiempo de los setenta políticamente esperanzador en hispanoamérica en el que arrojar al océano disidentes ideológicos generalmente de izquierdas desde una razonable altura letal en aviones del gobierno fascista de turno no era sino una prolongación creativa y aerodinámica del debate político. Como icono del siglo veinte, lo que veinte o vino o viene siendo un póster de Marlon Brando en la habitación de cualquier ilusionado adolescente que busca inspiración para ser un buen actor el día de mañana, es hoy en día o fue un póster de Henry Kissinger en el sótano de cualquier asesino de masas que quisiera dedicarse a la diplomacia psicópata en el futuro. Bueno, también se habla elogiosamente de su mano de santo en los setenta para controlar el imperialismo depredador de China frente al imperialismo "bueno" de Estados Unidos... Un trabajo de filigrana, es cierto. Ahí tenemos hoy en día a China dueña de gran parte del continente africano y moderando su proverbial expansión tentacular por el mundo con bases militares en la mismísima Argentina, tan lejos y tan cerca de Taiwan. Gracias por todo, Henry. Que en paz descanse el hombre por fin, oye.

 

sábado, 25 de noviembre de 2023

SI EL DUQUE DE ALBA LEVANTARA LA CABEZA...


Wilders, arriba, pestilente y rancio ultraderechista, ha ganado las elecciones en los Países Bajos. Ahora los paisesbajeños tratan de ponerle diques a toda costa como si no hubieran votado al yeti de chaqueta y corbata, lo que pasa siempre. ¡Huy! ¿Pero yo he votado a esta alimaña? Tenía su retrato de hace años y no parece que el bicho haya cambiado mucho su aspecto de simpático y buena gente, así que habéis votado precisamente "eso". Todos los días sueltan a un tonto preocupante y en todas las elecciones  de los países "civilizados" tienes alguno para escoger. A capricho. Tu madre no te hace caso y votas apocalipsis. La que te gustaba para salir prefiere a otro y votas suicidio colectivo. Añoras tu pasado imperial -como las gestas de Andorra en la conquista de Australia- y votas gas sarín. Y luego no veas la de gente buena y con estudios y con ideales que hace falta para desactivar la mierda de tu voto de mierda. La de paletadas de democracia pura que hacen falta para tapar la peste de tanto hijo de puta gastando libertad a manos llenas y para descojonarse del sistema... No, creo que no tengo un buen día con el sufragio universal. Con todo, esta noche voy a soñar a gusto con los viejos tercios españoles, los más canallas y arrojados del mundo. Por un ratito, en una encamisada, regresarán a Flandes como si fuera un viaje punitivo del Imserso y se encontrarán casualmente con el tontaina de Wilders a la salida de un mitin en Rocroi, por ejemplo...

 

lunes, 13 de noviembre de 2023

YA SABÍAMOS QUE TENÍAN MAL PERDER

 


Gracias a Bernardo Vergara, de eldiario.es

A ojos vistas (y orejas machacadas) la gente de la derecha -y más allá- se está ganando a pulso su mala fama de tramposos y consentidos. Da realmente asco tanta chulería de niñatos de la tercera edad y pasmarotes con capa patriótica de superhéroe (como si el Rey Pelayo fuera de la Marvel) manifestándose violentamente en las calles porque los rojos han firmado una tregua política con los independentistas, que les haya salido bien y no como a ellos, que les dieron calabazas de inmediato. Les irrita sobremanera que la izquierda use la cabeza y no para embestir. No pueden soportar que las cosas vayan bien en España a pesar de ellos. En la rabieta fuera de tono chillarán, insultarán y se retratarán a ellos mismos sin convencer con sus argumentos de pura histeria más que a los privilegiados y descerebrados de siempre o a los nuevos bípedos ecuestres (de siempre) de la ultraderecha, que ya salían convencidos del bar y de las monterías de Youtube. Es curioso, a más beneficios astronómicos de la Banca, más muñequitos gritones con la capa voladora; una cosa industrial, oye, o que no paran de enredarse con las cortinas del salón de la marquesa... Y así sigue de vistoso y rancio el folclore de la derecha, que es otro tipo de investidura, mirado mal y pronto.