miércoles, 15 de febrero de 2012

INVOLUCIÓN DE LAS ESPECIES

No soy nazi. Ni siquiera tengo prejuicios contra los feos. Allá cada uno con su escaparate. Pero si el aspecto denota algo, apariencias aparte, ahí estoy yo para registrarlo y evitar que mis amigas se líen con algún perro o que mis amigos le pidan dinero a alguna alimaña. Por eso he flipado con esta foto de El País. No he visto dos ejemplares de primate más contundentes. Qué repugnancia natural dan. ¿O no? ¿Son cosas mías? Y una leche. Esos dos no son seres humanos, coño. El gorila y la mandril. La gorila y el mandril. Los políticos catalanes. Vomito y lo dejo.

MALOS TIEMPOS PARA LOS OKUPAS




Desde que era un renacuajo he sentido una instintiva admiración por los rebeldes, los subversivos, los heterodoxos, los apóstatas, los quemados en la hoguera... Siempre los "fuera de la ley" a los otros, los de "dentro de la ley", los del ecosistema de modosidad y miedo. Hablando de apóstatas, a los excomulgados del sistema capitalista, es decir, a los pobres, también los llaman "demanda no solvente" en los manuales de economía. Por vacilarnos un poco, supongo. Les gustan más los eufemismos que a un cerdo una bellota. Así pues, yo me considero también "demanda no solvente", pero en acatamientos, me temo. Indisciplina en la sangre, tal vez. Por eso de pequeño mis primeros héroes en ropa de paisano fueron los insumisos. De aquel tiempo en que por no coger un fusil ibas a la cárcel. Esos tipos raros a los que traté de imitar con una humilde "objección de conciencia" cuando me tocó hacer la mili y acabé de bibliotecario para un instituto de gitanos hoy ya derribado a los que castigaban mandándoles a estar callados conmigo, porque leer, lo que se dice leer, allí no leía ni el que venía a mirar el contador de la luz... Hoy siento el mismo respeto y simpatía por los okupas. Por los okupas de verdad, no los de pastel o los parásitos. Los del Derecho a una Vivienda amparado por la Constitución. Y me da que no corre un buen año para ellos. No sé qué es lo que estará preparando este gobierno títere de las constructoras y las inmobiliarias, pero no será nada saludable con vítores para los que hayan remediado su intemperie sin hipoteca ... Al tiempo, que lo vamos a ver en la tele. Que la libertad les coja bajo techo y que los maderos sólo disparen con goma, pero que alguien vigile las madrugadas, que es cuando entran los hombres del saco con casco en las casas de los okupas buenos. Va mi tributo con la Musa Antisistema de arriba. Me ha quedado modernita y tal... Y sexy, que ya es difícil con la "libertad" de higiene y ropaje que se gastan algunas de mis primas. Todo ello por el enorme "chiste" de El Roto hoy en El País. Antológico. Lo pego en mi blog con su permiso, maestro. Chapeau.