miércoles, 2 de septiembre de 2015

JULIÁN LÓPEZ, A PUNTO DE ENCONTRAR SU NORTE


Ayer vi una peli española, "Perdiendo el Norte" (probablemente una cita del General Lee), y no estuvo mal. El guión andaba con las costuras al aire (cuatro guionistas son demasiados para que el traje no apriete), pero tenía sus buenos momentos de risa y su pelín de ternura. A destacar la vis cómica de Julián López. Una vez más. Una espléndida cosa genética que no se aprende... Pero que sí se puede... ¿Enfocar? ¿Controlar? ¿Medir? Espera, que ya tengo el verbo que estaba buscando: DIRIGIR. O dirigir mejor. Con esas dotes naturales, está a faltita de un director que lo gestione adecuadamente (quizá incluso Nacho García Velilla en un nuevo intento) para reventar en pantalla con el papel que no intente ceñirse a su registro, sino que vuele por encima. Pienso mientras escribo, así que me duplico arriesgadamente. Quizá lo mismo que Julián, que se ve a sí mismo mientras interpreta y olvida que los personajes son completamente distintos a las personas. No sé si me explico. En su siguiente película, con menos ensimismamiento y con un guión de tela más fina, seguro que lo peta. "Petar". El que habla de "tela fina"... Lo mejor de la peli la carcajada última con el chino. No las últimas, que también. La última última. Una gozada.