LA VIRGEN DEL CARMEN (8)

LO QUE COBRA EL QUE TE CORTA LA LUZ

Me supera la iniquidad de este sistema. Su obscenidad hiriente. La infamia general que estamos padeciendo como un sombrero de mierda desde la mañana a la noche. Lo que ha cobrado Ignacio Sánchez Galán, el presidente de Iberdrola, sólo en los seis primeros meses de este año, probablemente por cortarte la luz a ti, que si no la has podido pagar, es, evidentemente, porque no te alcanza el dinero; el que se negó a la "tregua invernal" con las familias amenazadas por impago; el que dijo a mi plin con el frío y las enfermedades de la gentuza... Los siete millones seiscientos mil euros que dibujo arriba sobre su frente y que espero le taladren las meninges por vudú digital. Los 11.600 millones que nos ha robado Cataluña Bank y ahora esto... "Eh, chaval, Iberdrola es una empresa privada y puede pagar a su jefe lo que le dé la gana...". Este es precisamente el argumento que me hace morder farolas por el cuello. Porque Iberdrola gana esa millonada de lo que abusa y roba gracias a la mordida con que ha untado a este gobierno de corruptos. Y ése es el argumento por el que una empresa de servicios básicos tiene un comportamiento mafioso y sus capos esos sueldos desorbitados mientras aquí nos la cogemos con papel de fumar... Porque 7'6 millones de euros no se le pagan a nadie en seis meses por trabajar. Ya me lo puedan decir en inglés o con números de Wall Street. Por hacer deporte, a lo mejor, pero ¿por trabajar? ¿Qué tipo de trabajo hace este tío? Seguro que no se lo podría contar a mi abuela sin que se le cayera la cara de vergüenza. O a lo mejor sí. Y de eso se trata.

EL MEGATENDERO CHINO

Xi Jinping, presidente de la República Popular China. Tu jefe. Y el mío. Y, lo que da más miedo, el jefe de todos los chinos de Lavapiés. Casado con una cantante de ópera (su Sonsoles china) y doctorado en Teoría Marxista (como si te aprendes nada más que las hojas de la izquierda de la guía telefónica), Xi Jinping está abriendo libretas de tendero por todo el planeta. Es el chiste del chino que aparece por un ambulatorio de la Seguridad Social y ni parece un paciente ni parece un familiar de visita, por lo que el celador, mosqueado, le pregunta: "¿Ha venido a alguna consulta o a pedir cita?". Y el chino le responde: "No. Sólo estoy mirando el local". Por continentes, naciones, ciudades y barrios. El jefe. Ingeniero químico. Si fuera actor, sería el Ronald Reagan de los chinos. Es peor. De los cinco euros que tienes en el bolsillo, cuatro son suyos. Y estás en la libreta.