A LA MAR FUI POR NARANJAS...

Miguel Urbán ha gritado como un loco en el congreso de Podemos. Y no lo hacía para hacerse oír exactamente, sino por hacerse sentir, que en Andalucía viene a ser una variante del verbo escuchar, pero con más duende. Hacerse SENTIR. Dejémonos ya de mirarnos las pelusas del ombligo y a arremangarse, hostias, que los malos se están descojonando de risa a nuestra costa. Y si hay que volver a la calle para que el miedo cambie de sitio, pues se hace. ¡Íñigo, a por piedras al río, con esa labia que tienes...!