viernes, 29 de junio de 2012

EL SICILIANO NERO

Aunque sólo sea por las peleas que ha tenido con Mourinho, me cae bien Balotelli, el delantero centro más lento  y patoso que he visto en mucho tiempo. Hoy estará celebrando sus dos goles a Alemania emborrachándose en un tonel de asar exploradores belgas. Es un Cristiano Ronaldo negro pero igual de perturbado. Qué flipe viéndole tras el segundo gol. Se quitó la camiseta a lo Rey León y dijo "Oh, Mundo, aquí está vuestro nuevo Dios Goleador Musculitos". Hay que entenderlo. Balotelli nació en Sicilia y a punto estuvo de morir de chico. Una cosa de estómago. Mala vida de bebé inmigrante que hubo que arreglar dejándolo al cargo de su familia siciliana de acogida, los Balotelli (pobres papis de Ghana, que no lo pudieron mantener). Bien por los italianos. 22 años de mala hostia en Palermo y luego en Milán, con el Inter. Un bicho superviviente y pendenciero con un don para el gol... lento y patoso. Lo han sufrido hoy los alemanes al italiano raro, al Otelo de la cresta post punk, god shave Toto Modugno, god save Franco Battiato. El domingo volveremos a disfrutar de su mal genio y de su visión africana de la mafia entre nuestros centrales. Ah, si no fuera por los políticos, Europa es que está para comérsela de variada y surrealista. Mario Balotelli, delantero centro de la selección italiana (fichado por el Manchester) y el que le decía hace cincuenta años a Tarzán que por ahí no, que yuyu, que pachi, que mutia, que tus huevos, ahora a vérselas otra vez con Sergio Ramos, el Tarzán de Camas, y a pedirle por favor, en perfecto siciliano de Ghana, que le deje marcar un gol lento y patoso a ese señor tan importante llamado Casillas. Tus huevos al revés, Mario. Yuyu. Ya lo verás.