lunes, 25 de marzo de 2013

PELEA DE JUECES EN EL BARRO


Dos simpatías por el juez que quiere ser juez en lugar del juez: 1) su juicio impecable en el caso de los atentados del 11-M, y 2) su inquina personal contra el PP. Tres antipatías por el juez que quiere ser juez en lugar del juez: 1) la bochornosa revelación de los papeles de Wikileaks en los que se manifestaba "secretamente" a favor de exculpar a los militares norteamericanos en el asesinato del cámara Couso en Irak, 2) su bochornosa condición de showman ultraconservador, y 3) su bochornosa mujer (ya sé que es una antipatía caprichosa, pero la antipatía es mía y no tengo que dormir con ella todas las noches: ya me dirás qué criterio y qué gusto tiene dictando sentencias un tío que se ha casado a favor de eso). Terminada la pelea en el barro 2 a 3 (en lo que a mí respecta), gana el juez Ruz. Por mucho que sea el juez que prefieren los ladrones del PP, estoy convencido de que les va a dar igual. El calvo los metería en chirona con un cangrejo alojado en el culo, y el del flequillo haría lo mismo, idéntico cangrejo tocando las castañuelas por ahí dentro, pero además tendría la gentileza de proporcionarles un frasco de vaselina y escribirles una cariñosa nota para que la pusieran en la pared de la celda: "Sin rencores, salaos". Así que a Bermúdez que le vayan dando... cualquier cosilla en prime time con su mujer, la que se aborbotona de argumentos y acaba diciendo "jo", totalmente periodista rubia.

SUELTA DE REVILLAS


Oyendo a Miguel Ángel Revilla el otro día en la tele tenías la sensación de que te estaba vendiendo un rallador de queso cojonudo para comprender la situación económica actual. Un tono de maestro de escuela entreverado con cantinela de vendedor en el Rastro, y de regalo una latita de anchoas. Si eso sirve para que la gente comprenda con manzanas (¡señora!) que Draghi no es otra cosa que un listo y un vampiro a sueldo, o para que los estafados por las preferentes se sientan un poco menos solos frente a los banqueros y los políticos, bienvenido sea el populismo del personaje, un Don Pimpín español metido a Mario Bros. Sí, ya estaba vivo cuando Franco y flipaba con José Antonio. Sí, también ha sido director de banco. Sí, tiene viejas reseñas en prensa que son lamentables... Pero no le gustan las perífrasis ni los eufemismos y está tan cabreado con lo que está pasando que le perdonas eso y hasta sus aires de Mesías de segunda división, esa fatuidad de un Jesús Gil en un jacuzzi que ha sabido reciclar en coquetería de negociador de rehenes llegando al cordón policial: "Dejadme a mí, que yo los conozco". La vida de los secuestrados al mismo nivel que el espectáculo de verle arremeter contra los malos. Alegremente. Gustándose. Brindando al tendido. Ahora que se ha muerto el toro Ratón(*), a Revilla se le van multiplicar los contratos por esas ferias de la tele.

(*) Nota bene:  Para todos los que quieran asistir a las honras fúnebres del toro asesino, se comunica que la capea ardiente se celebrará esta tarde a las 17:00 y el encierro de monaguillos borrachos a las 18:00.