martes, 17 de enero de 2023

EL INCREÍBLE HOMBRE MENGUANTE MAÑUECO, FUTURA ESTRELLA DE TELEVISIÓN



Alfonso Fernández Mañueco, arriba, del PP, presidente de la Junta de Castilla y León, y el que consintió sin dimitir el infame pacto con la ultraderecha más rancia y desbocada de VOX, que se quedó con la vicepresidencia, a día de hoy le relinchan los caballos en la distancia cada vez que oye su nombre como en "El Jovencito Frankenstein". El caso es que tiene al fascista del vicepresidente, García-Gallardo, un cargo en principio vacío y solo lucrativo (una puta prebenda), completamente subido a la parra y soltando sandeces sin parar contra mujeres, homosexuales y emigrantes; un niñato patético, el orco atildado que decíamos en otra entrada, berreando su impunidad de invitado a la democracia y sin cortarse un pelo. Así que Mañueco, a la fuerza ahorcan, se ve obligado a salir al paso cada dos por tres para "justificar" las salidas de pata de banco de la alimaña petimetre. Para atenuarlas, para desactivarlas, para anularlas y para quitarles importancia en los medios de comunicación: "No le hagan caso al niño, que es adoptado". Si fuera un político con lo que hay que tener, ya hacía tiempo que habría dimitido, pero es una marioneta de los otros fascistas de su propio partido y traga con lo que haya que tragar, al tiempo que intenta disimular haciendo malabares como en el chiste del control de drogas de la Guardia Civil de tráfico. Y cada vez que lo hace, Mañueco mengua un poco. Se hace más pequeño. Le sale la voz de pitufo. Cuando pase la movida del aborto, vendrá otra, y otra, y otra... Y llegará el día en que veamos al Muñueco Mañueco haciendo su ridículo definitivo al intentar explicar por enésima vez los desmanes descerebrados de su vicepresidente. A voz pitufa en grito y debajo (muy debajo) de una sombrilla de micrófonos de los que saldrán unas risas enlatadas tras cada parida insostenible. Ha nacido una estrella.