martes, 10 de julio de 2012

MARIO, MARIO, MARIO, ENCIMA DEL ARMARIO...


Con mujer y dos niños, parece aventurado e injusto llamarlo Mario "Draghi" Queen, pero fue vicepresidente en Europa de Goldman Sex, el mismo banco de esperma que ayudó a Grecia a ocultar su agujero de las vergüenzas para poder entrar en el cuarto oscuro de la Unión Europea. Ahora es el presidente del Banco Central Europeo, el puto discjokey que hace bailar a todas sus primas en la macrodiscoteca de Bruselas, trabajo que compagina con el de traficante de micropuntos interesantes, o sea, de interés. Pero no porque no le guste el fútbol (otro argumento para considerarlo un caniche) tiene derecho a imaginar a España llorando como Balotelli en la final donde perdieron cuatro a cero. Así se lo dijo a un colega periodista en una charleta privada que se ha hecho pública. Que nuestros políticos de mierda den pie para que piense así un pretor romano (de los del tipo sex in uniform), sólo confirma que el partido popular es gay (pasivo) y que los Siniestro Total tenían razón, como en casi todo, de modo y manera que no le demos nunca la espalda a Mario Draghi Peplum, si no queremos tener el culo intervenido una noche loca europea cualquiera...