ZUMBADOS TÓXICOS CON PÚLPITO
Llegado el momento, si alguien deja de vacunarse contra el coronavirus persuadido por las palabras infectas de Cañizares, y muere, habría que denunciar al arzobispo pirado por inducción al suicidio, denegación de socorro y envenenamiento. Hay que ser malo del demonio para oponerse a la ciencia de esa manera y hacer que mueran esos ignorantes sin cultura que les siguen a ciegas.