lunes, 8 de septiembre de 2014

LA DIADA REFINITIVA


Los fastos de la Diada quieren ser fastísimos este año, no sea que no comprendamos la importancia de confeccionar una bandera catalana que se vea desde el espacio. Entre Carme Forcadell y Josep Rull van a intentar hacer un Christo con Cataluña toda, esto es, envolver a la ciudadanía para regalo en un vistoso paquete sin destinatario. Una cosa conceptual. Conceptual soberanista. Y mira que está feo empaquetar ciudadanos o usarlos mismamente de paquete para sus intereses, pero parece que la gente está encantada con dejar de ser personitas por un día. Tampoco sé en qué categoría del Guinness inscribirán esa "V" que quieren dibujar en Barcelona, a no ser que hayan llegado a un acuerdo con los de Google Maps para ser la primera ciudad del mundo que se hace un selfie en una postura chorra. Aunque están en su derecho, qué leche. ¿En su derecho o en su derecha? Qué más da. Lo importante es celebrar y reivindicar una vez cubiertas todas las necesidades básicas de la gente: trabajo, sanidad, educación, vivienda, corrupción, etc. Lo fundamental, nen, es ser independiente y marcar con rotulador gordo una bonita frontera nueva que todo lo resuelva como siempre ha ocurrido desde que el mundo es mundo con las lindes unilaterales entre vecinos... La Diada Refinitiva, por lo tanto. La Cojodiada. La última antes de la CONSULTA. Como las borracheras que se pegan algunos antes de ir al médico a que les diagnostique lo suyo. Ojalá que al de la desinteresada consulta le guste el sake. ¿Cómo se dirá "banzai" en catalán? ¿Mare de Deu?

EL LLANTO DE LOS PADRES EN LA VUELTA AL COLE