viernes, 1 de mayo de 2020

DIARIO DEL CORONAVIRUS EN ALGÚN LUGAR DE LAVAPIÉS (49º DÍA DE CUARENTENA)



Teleprimero de Mayo, teledía del trabajador. Las manifestaciones reivindicativas contra la nueva esclavitud del teletrabajo sólo han sido telepáticas. En la Gran Fiesta del trabajo han cerrado el hospital de Ifema. Mucha gente en la calle. Digo trabajadores. Los que se quedan sin trabajo y los que había fuera, protestando y llorando. Isabel Díaz Ayuso ha aparecido para hacerse la foto. Había cientos de mascarillas, pero sólo ella iba enmascarada. Y con guantes negros. Una atracadora de película distópica. ¿De dónde les viene a los malos esa gana de significarse siempre?

Si no quieren que la gente pasee está muy bien ponerle un horario. Y lo han hecho, por supuesto. Da igual si es un horario asumible o arbitrario o demencial, con ponerlo ya es suficiente para que no apetezca. Otra cosa es evitar las aglomeraciones. Con lo que nos gusta en Madrid salir a pasear codo con codo de a docenas saliendo de los portales y sin dejar hueco ni en aceras ni en bares, alguien tenía que tomar cartas en el asunto.

El debate sobre los tercios de aforo en los bares no conduce más que a los tercios en sí y vuelta a empezar. Tampoco van a servir los quintos de aforo, los chupitos de aforo o las copas de balón de aforo.

Con todas estas trabas e impedimentos por nuestro bien para que seamos felices a la antigua manera, espero que luego no se extrañen de que nos tomemos la esperada vacuna cuando aparezca como se tomaban la Poción Mágica Asterix y Obélix... Porque luego se van a dejar los municipales, policías, inspectores o los exigentes contadores de aforo las sandalias vacías en el suelo del primer papirotazo con que los pongamos a volar lejos de las puertas de los bares...

-¿Qué te preguntaba ese tonto para no dejarte pasar dentro?
-Que si estaba vacunado. Que le enseñara el certificado. Que lo demostrara.
-¿Después de todo lo que hemos pasado no ibas a tomar la vacuna?
-Pues eso.
-Están locos estos romanos...