domingo, 1 de agosto de 2010

VOLVER AL CAMPO DE CONCENTRACIÓN Y BAILAR


Curioseando por ahí, en la web de Oink, me encontré con un vídeo de esos con los que vuelves a plantearte si somos la hostia como especie o una estúpida broma de los aminoácidos. El que no dude viendo la pieza, que se lo haga mirar. Una cosa entre lo milagroso y lo escalofriante, pasando por lo ridículo... Y lo sublime. Pero el viejo sobrevivió y aquí está.

MI BARRIO (39)

En mi barrio aprendes antes a decir así-así en wolof que a decir buenos días en inglés de oficina triste y eso es porque a Senegal se llega silbando o comprándoles un disco pirata que huele a cacahuete. Y lo que hacen los españoles con una guitarra lo hacen los senegaleses con un cacahuete: maravillas. Nosotros lo llamamos a lo mejor flamenco y ellos lo llaman "mafe" seguro, que es un plato con cordero, arroz y repiqueteo de cacahuete que está para chuparse los dedos, así que la gente ignorante dice que por eso nuestros morenos tienen las manos bilingües, en rosa palo y negro, pero yo creo que los senegaleses tienen las palmas como les da la gana porque siempre están contentos de verse y saludarse todos los días y a cada momento menos cuando los merodea un policía cabrón y entonces ponen todos unas caras de ingenieros aeronáuticos pensando que da gloria verlos. Otra cosa es que se esperaran el paraíso alicatado en España y ahora tengan que vivir en los bajos de los bloques como cuando antes los tenían en los bajos de los barcos y con cadenas. Depende de si a ti te pilla en la siesta o no, pero al corazón no le viene mal escuchar sus carcajadas enteras, sin pizquita de pasado. Para sus familias y amigos en Senegal fijo que ya son los marqueses de España, potentes timadores de locutorio. Pero si se preguntan entre ellos: nanke-nanke, así-así. A quién le toca hacer el mafe hoy.