sábado, 30 de julio de 2016

MARÍA FRISA: ALGUNAS IDEAS PARA CENSURAR MEJOR


María Frisa, autora de "75 Consejos Para Sobrevivir en el Colegio". Vale, una caricatura un poquito idealizada. Le he quitado años y la he puesto más guapa. Es mi blog y es mi pincel y es mi estado de ánimo. No he pintado crucifijos porque la mujer ha logrado escapar a tiempo, aunque todavía se oyen los martillazos de los carpinteros romanos. España está llenita de carpinteros freelance de los romanos. Unos veinte mil que piden por escrito que se retire la obra de las librerías y que a su escritora la coloquen unos cincuenta años de ejercicios espirituales en el Monasterio de Ñoñería de las Dueñas, de fundación feminista y ultra bien pensante. El libro en cuestión es una obra de ficción, pero a las Dueñas y sus Consortes les da lo mismo. Que si hay ofensa contra los que sufren acoso escolar, que si es machista, y que no está impreso mirando a la Meca de la Igualdad de Género, Loado sea Di@s. La mujer ha intentado aclarar que su protagonista, Sarita, no es una persona, sino un personaje, y que como tal personaje en una obra de ficción ya puede venir Moisesa con los Tablos de la Leya que a un escritor no le enmienda el personaje ni lo que diga el personaje nadie más que la inspiración. Otra cosa es el editor (ole por Alfaguara, que la apoya a muerte), la crítica literaria o la respuesta del público en cuanto a las ventas, pero la ficción es la ficción, y es soberana en su reino de mentiras, ocurrencias, invenciones y fantasías. Hay quien vive de eso y para eso y la realidad NOS importa casi una mierda. Pero también hay quienes viven de dar por saco porque la imaginación no les llega para discernir una cosa de la otra, básicamente porque ni leen ni les gusta la gente que lee. Son los que no leen ni un libro al año y están dispuestos a seguir bajando la cifra, esto es, si yo no leo nada, todavía voy a leer menos porque me basta con un twitt acusador para comprender la obra entera y saber que es perniciosa para nuestra moral de borregos con calcetines de marca... Así que la retiro del mercado. O lo intento. Y este año leo "Menos un Libro". Este es el patio y estos son los geranios. No solo que un novelista viejo no pueda ganar dinero con sus libros (prohibido por ley, actualmente), sino que ay cómo ofendas a alguien en mitad de tu carrera. En el caso de María Frisa, los ofendidos son al parecer los niños acosados, esos que no saben distinguir un huevo de una tableta de chocolate, los pobrecillos, y necesitan que todos los ñoños, pazguatos, tiquismiquis, puritanos, mojigatos, pacatos, remilgados y gazmoños de este país les defiendan de una obrita de ficción malencarada y sarcástica. Ni por flores. No se lo creen ni ellos, pero tienen tiempo libre y lo gastan. Por mi parte,  yo estoy con lo que decía ya en el siglo X el alumno más destacado de Almutamid de Córdoba, Almutacid de Arriate: "Que les den mucho por culo". Ya se me podrá argumentar en contra que sus opiniones también son válidas o que si el criterio didáctico o que si la fragilidad de la infancia... Repito la frase de Almutacid. Y lo que dije más arriba: La ficción es soberana. Por esta regla de tres de los censores, habría que retirar de las librerías alguna que otra obrita menor de la literatura por apología o defensa de ciertas conductas inapropiadas para la convivencia. Las hayan leído o no estos señores ("Menos un libro al año" son muchos libros no leídos, llegados a una edad), quiero darles algunas ideas para que las retiren de las librerías y bibliotecas, si no las tienen ellos en mente ya, que tampoco sería de extrañar. Aquí van las obritas y los criterios para su oportuna retirada, censura y/o quema en la plaza pública. Habráse visto...

"Tom Sawyer ", de Mark Twain: Desobediencia infantil, racismo.
"Don Quijote de la Mancha", de Miguel de Cervantes: Apología del Alzheimer.
"Matar a un Ruiseñor", de Harper Lee.: Vandalismo (y que Harper leía).
"Lolita", de Nabokov: Abuso de menores.
"La Odisea", de Homero: Inmigración ilegal.
"El Alcalde de Zalamea", de Calderón de la Barca: Atentado contra la Autoridad.
"Moby Dick", de Herman Melville: Matanza de ballenas.
"Tarzán de los Monos", de Burroughs: Maltrato animal para festejos.
"Cien Años de Soledad", de García Márquez: Apología del Autismo.
"La Divina Comedia", de Dante: Necrofilia.
"El Principito", de Saint Exupery: Proselitismo.
"La Metamorfosis", de Kafka: Suplantación de identidad.
"El Capital", de Karl Marx: Incitación a la insurgencia civil.
"Hamlet", de William Shakespeare: Profanación de tumbas.
"Crimen y Castigo", de Dostoievski: Incitación al asesinato.
"Cinco Horas con Mario", de Delibes: Necrofilia.
"La Santa Biblia", de Dios: Canibalismo, Incesto, Homofobia, Machismo.
"Los Miserables", de Victor Hugo: Desobediencia civil.
"El Lazarillo de Tormes", anónimo: Delincuencia juvenil.
"Alicia en el País de las Maravillas", de Lewis Carroll: Ludopatía. Consumo de drogas.
"Drácula", de Bram Stoker: Apología del dopaje.
"Un Tranvía llamado Deseo", de Tennessee Williams: Acoso sexual en transporte público.
"La Gata sobre el Tejado de Zinc Caliente", también de Tennessee Williams: Maltrato animal.
"París era una Fiesta", de Ernest Hemingway: Apología del alcoholismo.
"Bajo el Volcán", de Malcom Lowry: Apología del alcoholismo, de las drogas y del Parkinson.
"En el Camino", de Kerouac: Enaltecimiento de la mendicidad y el vagabundeo.
"El Hombre sin Atributos", Robert Musil: Apología de la disfunción eréctil.
"Informe sobre Ciegos", de Ernesto Sábato: Maltrato de invidentes.
"Rayuela", de Julio Cortázar: Incitación a las pintadas callejeras.
"Trópico de Cáncer", de Henry Miller: Pornografía. Primeros Ninis. La Generación Perdida.
"Madame Bovary", de Flaubert: Incitación al adulterio.
"Los Viajes de Gulliver", de Jonathan Swift: Inmigración ilegal.
"La Náusea", de Sartre: Incitación al suicidio.
"Frankestein", de Mary Shelley: Profanación de tumbas.
"La Celestina", de Fernando de Rojas: Proxenetismo.
"Conversación en la Catedral", de Vargas Llosa: Incitación al odio religioso.
"Un Mundo Feliz", de Aldous Huxley: Apología de las drogas.
"Rebelión en la Granja", de George Orwell: Enaltecimiento del terrorismo.
"Crónicas Marcianas", de Ray Bradbury: Absentismo Laboral.
"Rojo y Negro", de Stendhal: Incitación al odio racial.
"La Isla del Tesoro", de Stevenson: Apología de la piratería.
"Pedro Páramo", de Juan Rulfo: Necrofilia, espiritismo.
"La Vida es Sueño", de Calderón de la Barca: Absentismo laboral.
"Tiempo de Silencio", de Luis Martín Santos: Maltrato de sordomudos. Medicina ilegal.
"Romancero Gitano", de García Lorca: Incitación al odio racial.
"Robinson Crusoe", de Defoe: Absentismo laboral.
"Yo, Robot", de Isaac Asimov: Apología de la esclavitud.
"El Jugador", de Fiodor Dostoievski: Ludopatía.
"Una Temporada en el Infierno", de Rimbaud: absentismo laboral.
"Don Juan Tenorio", de Zorrilla: Acoso Sexual y Violencia de Género.
"La Saga Fuga de J.B.", de Torrente Ballester: Alcoholismo.
"El Origen de las Especies", de Darwin: Maltrato animal.
"Las Uvas de la Ira", de Steinbeck: Alcoholismo.
"Prometeo Encadenado", de Esquilo: Apología de la esclavitud.
"Luces de Bohemia", de Valle Inclán: Alcoholismo y maltrato de esperpentos.
"Fortunata y Jacinta", de Galdós: Lesbianismo.
"En Busca del Tiempo Perdido", de Proust: Absentismo laboral.
"El Señor de los Anillos", de Tolkien: Incitación al Consumismo.
"El Proceso", de Kafka: Ofensa contra el honor de los funcionarios.
"La Conjura de los Necios", de Kennedy Toole: Maltrato de discapacitados.
"El Buscón", de Quevedo: Pornografía masculina.
"El Tambor de Hojalata", de Günter Grass: Contaminación acústica.
"El Ruido y la Furia", de Faulkner: Contaminación acústica.
"Canto General", de Neruda: Contaminación acústica.
"Marinero en Tierra", de Alberti: Absentismo laboral.
"La Hoguera de las Vanidades", de Tom Wolfe: Piromanía.
"Platero y Yo", de Juan Ramón Jiménez: Zoofilia.
"Guerra y Paz", de Tolstoi: Maltrato de bipolares.
"Las Ilusiones Perdidas", de Balzac: Incitación al absentismo laboral.
"Las Enseñanzas de Don Juan", de Castaneda: Apología de las drogas, absentismo escolar.


Estamos contigo, María.
Se aceptan aportaciones para este donoso escrutinio de obras de ficción censurables de toda censuración. Yo me lo he pasado pipa.
Un apoyo de Elvira Lindo. Con su Manolito sabe de lo que habla.