viernes, 9 de septiembre de 2022

CARLOS ALCARAZ, MATES CON UN PIANO DESDE UN SEXTO PISO


Las dejadas de Carlos Alcaraz, arriba, son como si untara de pegamento un violín y lo tirara contra una pared, a ver qué pasa. Al rival le cuesta devolverlo y el murciano gana muchos puntos así. De los saques y derechazos desde el fondo de la pista, la impresión que me da es que el hombre intenta lanzar vacas con precisión al campo contrario y a veces es complicado devolverlas con una raqueta homologada. ¿Es la finura la principal virtud de su juego?  No veo yo a Bécquer (el sevillano, no el alemán) jugando con él de pareja de dobles, pero todo es opinable. Me gusta que sea "el relevo natural" (puro campo) de Rafa Nadal, dicho por todo el mundo, y me da alegría ver sus progresos en la pista lapidando a sus rivales zambombazo va zambombazo viene hasta que piden confesión, pero el chaval no acaba de enamorarme. No es la misma sensación, el mismo e irreflenable impulso que sentía cuando me arrimaba por debajo a la tele de los bares para verle las bragas a Steffi Graf, no sé si me explico, y ni era española ni nada. A lo mejor soy mal patriota.