miércoles, 23 de noviembre de 2016

POBRE DIABLA



Hasta en lo más profundo de mi inquina por el basural de corrupción de este país, hay un punto de lástima por seres tan carentes de escrúpulos, de bondad y de respeto. Un punto de conmiseración casi cristiana: son felices con la mierda como los escarabajos peloteros, pobres bichos, qué existencia más miserable. Y les deseas un campo de concentración para todos ellos o la cárcel, no aplastarlos con la bota. Tampoco que a uno de ellos le dé un infarto y muera sin haber pagado por la porquería que ha esparcido a su alrededor. Descanse en paz Rita Barberá.

3 comentarios:

  1. Te sientes igual que yo. Pobre diabla.
    Eso sí, como dice Dyhego: Santa Rita, Rita que lo que se da no se quita.
    ¿Y si no se lo han dado?
    Qué mundo tan asqueroso.

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  2. Voy a ser un poco cabrón. ¿Alguien ha contado los miles de infartos y muertes que han provocado ellos con sus canalladas y con su maldad en este país?

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