LOS VAMPIROS ELÉCTRICOS

Borja Prado, presidente de Endesa. Uno de los mayores vampiros de este país. La marca de sus colmillos es bien conocida y es muy similar a la señal de mordida que también dejan los otros vampiros de Fenosa o Iberdrola. Como todos los vampiros de la subespecie eléctrica no suelen dejarla en el cuello, sino en las paredes de tu casa. Vampiros subvencionados por el estado y a los que les pagamos puntualmente la ortodoncia y el plus de nocturnidad. Con cifras y datos en la mano. En siete años han subido la factura de la luz casi un 70% con la excusa (estafa) del "deficit tarifario", un invento de Rodrigo Rato, siempre inocente en estas cuestiones. Una mentira valorada en 26.000 millones de euros a tocateja. Por algo son las eléctricas que más ganancias generan de Europa. Por algo son las corporaciones mafiosas donde mejor funciona la aberración de la puerta giratoria entre los ministerios y la empresa privada. Cubiertas de miles de inútiles denuncias de los consumidores y con consejos directivos que muy poco tienen que ver con la voluntad de servicio que se le ha de suponer al sector energético (Borja Prado fue asesor de los Rothschild y es miembro de la Trilateral), continúan adelante con el saqueo, aplaudidos a rabiar por sus políticos comprados (lo del ministro Soria es de Juicio de Nuremberg), y generando fenómenos ignominiosos como la llamada "pobreza energética" (genocidio de la demanda no solvente) o la afrenta de la "protección solar", esa extorsión feudal: "si quieres conseguir energía por tu cuenta, nos tienes que seguir pagando a nosotros por el dinero que dejamos de ganar contigo, tío por libre...". Lucro cesante que se llama a eso y que yo a mi vez llamo "protección solar" (otros lo llaman "peaje solar") por la aureola semántica de los bronceadores y por lo mismo que la mafia al uso llama "protección" a la extorsión que ejerce sobre los negocios bajo su tutela: "Te protegemos de nosotros mismos. Ese es el servicio que tienes que pagar". En este punto medieval estamos. Con vampiros y asaltadores de caminos por todas partes, y si se te ocurre pedir amparo a tus gobernantes te encuentras con el sheriff de Nottingham, que viene de cenar con Drácula y que te dirá que te has calentado por encima de tus posibilidades. Y en lo que respecta al de arriba, no se te ocurra utilizar el enchufe que luce en la frente para cargar el móvil, que te sale la wifi de Wall Street y el vídeo de aquí está la navidad, págala o vas preso.

Para una mejor comprensión del asunto en todo su calado (slurp), y por mejorar cognoscitivamente la rabia con mala sintaxis de mi entrada, mucho mejor el estupendo artículo de Merche Negro en ElDiario.es del que facilitamos su enlace justito aquí.