DECLARACIONES DE RAJOY SOBRE EL 3-0 DE BRASIL A ESPAÑA
RAJOY:
"Todo lo que pasó en el partido de anoche fue mala suerte, salvo alguna cosa".
Enhorabuena a Brasil (Scolari me pareció un entrenador estilo Del Bosque, cojonudo), buena pomada a los tobillos de Iniesta este verano, y una cosita más, sin menospreciar el juego de Neymar o de Fred o de Hulk: los tres goles brasileños los metió un psiquiatra desde la grada. Anoche pudieron engañarme, que era muy tarde, pero esta mañana lo he visto todo claro...
salvo... como unos 'hilillos' que le tengo puestos a san Dimas para que conjure el vía crucis del pobre Bárcenas.
ResponderEliminarJajajajajaja...
ResponderEliminarEs que ser pequeñarro tiene sus inconvenientes. Iniesta, Chavi, Villa..., rebotaban en los pectorales y en los abdominales de aquellos hombretones sin el menor indicio de falta. Al gigantón nuestro le faltó cintura y el Arbeloa fue un coladero. Los otros liliputienses de la delantera (excepción sea hecha del espigado Niño Torres, que tenía el pensamiento en los bucólicos céspedes de Kensington) no lograban colar su cuerpecito entre la muralla de proteína empaquetada.
ResponderEliminarCon estas carrocerías de mini se aguanta un corto tiempo de gracia pero en seguida se impone la lógica: un titi espabilado le roba el plátano a un chimpancé tontorrón; pero ante un chimpancé espabilado un titi espabilado sale siempre por pies (por manos).
La leyenda de David y Goliat es un invento para mandar al matadero a los esmirriados israelitas que se las tenían que ver con las huestes de los forzudos semitas de Nabucodonosor, o con los bien alimentados egipcios del fértil Nilo. Al final, estar cachas es siempre una ventaja incontestable. Y en el Mundial del 2014, estos pequeñines nuestros no van a dar la talla.