CEREZAS

Sigo pintando comida. Sigo con los bodegones. Eso es que estoy de los nervios. Cerezas. Pobres y sencillas cerezas que sirvieron para darle nombre a un defenestrado y fatuo programa de TV aliñado por Julia Otero y sus iluminaciones de chica lista por debajo de un 100 de coeficiente intelectual... Uf... Una mujer que cuida tanto sus comisuras hasta hacerlas comillas de lo que dice tiene que ser, por fuerza, gilipollas. Pagada de sí misma y de alguno que la tendría en nómina de apaleadoras blandas. A los entrevistados les ponían chanel nº 5 para que todas las respuestas apestaran a apaño. A Nieves Herrero se le apareció el Papa. ¿Quién se le aparecería a esta suegra de Barbie? Basta de hablar de imbéciles. Las cerezas son otra cosa, leche.