martes, 1 de febrero de 2011

VIVAN LOS MONICACOS

Últimamente visito algunas páginas de peña que se dedica a pintar en cuadernos por ahí. Esbozos urbanos, bocetos de gente, bares, parques. Cuando son buenos, son la bomba. En español, Ladrones de Cuadernos o Urban Sketchers Spain. En mundial, los Urban Sketchers... Y un verbo en inglés: To Doodle, que es básicamente garabatear y dibujar monicacos. De ahí salen los Doodlers Anonymous, que son la leche, los colegas. Me he fijado que en la peña hay de todo, desde pirados jovencísimos hasta venerables ancianitas pinta margaritas. Pero esas páginas están vivas. Esos cuadernillos destilan alegría. Dibujan mesas a la remanguillé, se dibujan los zapatos, sus propios lápices, la gente que les rodea, coches, motos, edificios. Emplean acuarelas, rotuladores, lápices, pinceles, carboncillos, café, vino. Son camareros, profesores, funcionarios, músicos, arquitectos, estudiantes... Y ni la más mínima gana de ser perfectos. Lo fundamental es el goce, el momento y la rapidez. Los cabrones son polaroids humanas. Y saben de lo que disfrutan cuando se enseñan sus libretillas como cazadores, cuando hablan entre ellos de cuadernos, tintas, grosores, pesos, fríos, lluvias y comidas. Ole sus huevos. Vivan los monicacos. Yo creo que Juan Gris fue uno de ellos, pero en sedentario, tanta mesa y tanto cafelito, chaval... Lo de arriba es pura envidia. Mesa propia y metasketch con una acuarela que saqué de una foto de El País: Central Park. Para que digan que no viajo.

1 comentario:

  1. Lowon, hace poco estuve buscando de estas maravillas sobre Nueva York para unas manías mías para el Guardián entre el centeno. Esta gente capta el alma de los sitios, de la gente, de los lugares…

    Muchas gracias, Lowon. Un abrazo

    ResponderEliminar