Confirmado.
Call of Duty 5 (World at war) es una verdadera locura de violencia y pánicos. La guerra tal y como es, probablemente. Cuando sale de la hierba un japonés gritando "banzai" y se te viene encima con la bayoneta por delante, ni todos los monstruos de "Halo" o "Gear of War" o "Doom" te provocan un terror parecido. Una sensación de lo más escalofriante. Así quedaron los americanos U.S.A. que sobrevivieron: tocaditos de por vida y con un dedo en el tarro de la mahonesa. Impresionante también la versión para consola de
Brothers in Arms (Operación Market Garden). Momentos gloriosos a cámara lenta y con zoom cuando le vuelas la cabeza a un nazi. Una delicia para psicópatas. La realidad es tan literal y está tan desarmada... La ilustración de arriba no es del videojuego, que son infinitamente mejores, pero han salido de mis deditos, como quiero que sigan siendo en este humilde blog de mierda. ¿Mejor hablar de psicópatas, violencia y sangre, que de poesía? Hay días que sí. Son las ganas de atacar a la bayoneta una cesta de navidad hasta sacarle sus tripas de melocotón en almíbar y sus cálculos renales de garrapiñadas.
Confirmado. Call of Duty 5 (World at war) es una verdadera locura de violencia y pánicos. La guerra tal y como es, probablemente. Cuando sale de la hierba un japonés gritando "banzai" y se te viene encima con la bayoneta por delante, ni todos los monstruos de "Halo" o "Gear of War" o "Doom" te provocan un terror parecido. Una sensación de lo más escalofriante. Así quedaron los americanos U.S.A. que sobrevivieron: tocaditos de por vida y con un dedo en el tarro de la mahonesa. Impresionante también la versión para consola de Brothers in Arms (Operación Market Garden). Momentos gloriosos a cámara lenta y con zoom cuando le vuelas la cabeza a un nazi. Una delicia para psicópatas. La realidad es tan literal y está tan desarmada... La ilustración de arriba no es del videojuego, que son infinitamente mejores, pero han salido de mis deditos, como quiero que sigan siendo en este humilde blog de mierda. ¿Mejor hablar de psicópatas, violencia y sangre, que de poesía? Hay días que sí. Son las ganas de atacar a la bayoneta una cesta de navidad hasta sacarle sus tripas de melocotón en almíbar y sus cálculos renales de garrapiñadas.
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el hartazgo nos tiene medidos a todos por igual, o hace preferencia por ciertos caracteres? felices fiestas, ante cualquier irritacion, maizena. Saludos.
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