FRODO BOLSON de BOLSON CERRADO

Las autoridades niveladoras de España han impuesto un justiciero reglamento para los contenidos de los espacios humorísticos que se emitan en las distintas cadenas de televisión. Nadie se ha atrevido a ponerlo por escrito, porque no habría manera de hacerlo con dignidad y sin que se te caiga la cara de vergüenza. Pero hay consignas. Visitas furtivas a despachos. Amenazas. El humor ha de ser igualitario, paritario, piadoso, demócrata y falso. Ni chistes de enanos, ni parodias de gangosos, ni remedos de homosexuales, ni está un ciego en el bingo. Bueno, si el ciego se ha quedado ciego por un accidente vale. De nacimiento no, que es discriminación y befa manifiesta contra una muy digna minusvalía. Ya no hay tullidos, putas, maricones, guardias civiles encabronados, gitanos ladrones, catalanes avaros, gallegos indecisos, vascos bestias, andaluces vagos, canarios lentos o valencianos sosos. Curioso que sí pueda seguir habiendo madrileños chulos. Como somos lo único que queda del estado, pues los libertarios a por nosotros. Pobres enanos, no sólo no los dejan trabajar en la tele, sino que tampoco podemos hablar de ellos: ahora que son superiguales que los demás les llega el tiempo del hambre con la hipocresía imperante. ¿Hobbits sí y bomberos toreros no? Tenemos el país que nos merecemos y las libertades "que nos hemos dado". Cáncamo.