viernes, 22 de mayo de 2015

LA OTRA ESPERANZA, LA BUENA...


6 comentarios:

  1. La esperanza es algo tan particular de cada cual como etérea. Ya sé que es uno de los carros que unce a los bueyes, ¿o es al revés?, y la jueza tiene mi reconocimiento desde siempre, pero eso no implica que me dé mayor fiabilidad el carro del que trata ella de tirar. País de ilusiones.

    Fermín.

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    1. La ilusión es la que mueve el mundo.
      Un pueblo sin esperanza es un país a la deriva.

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  2. Sobre esa espalda veterana, levantaré mi iglesia. Tabernáculo de todas las Españas, sancta santorum de los buenos cegados por la luz de la verdad, pirámide truncada (le sobraba el pincho) que espejea en el páramo manchego (qué próximo te queda el panteón de la bestial vestal de los bastos territorios de la Mancha...). Un día te miré y vi que eras buena, dulce y túrrica-ebúrnea dama de los legajos justicieros. Que a tus años devanes la madeja de los corazones lastimados, de las aortas a pique de reventar de indignada hipertensión, .de las crisálidas posadas, de tantas manos yertas, de las calcomanías suicidas que embadurnan muchas aceras de las ciudades-infierno de la patria... Teresa-Carmena de Calcuta, que con tu carrito acemilero recoges los despojos de las almas parias de esta tierra, a la luz vespertina de farolas de diseñp que mientan las corruptas comisiones patronales (CC.PP).
    Ay, carmena, infusión salvífica de yerba buena. Aparta de mi este cáliz de ignominia, dame la paz de esa hora en que el aire se serena.

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  3. ¡Qué alegría me da oírla! Ella sí que es una esperanza, la buena. Yo la quiero para que gobierne el país, pero me conformo con que sea para Madrid. A ver si hay suerte.

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    1. Yo también la quiero para que gobierne el país.
      Tal vez sea pedir demasiado.

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