sábado, 16 de octubre de 2010

LAS CELOSÍAS PORNO Y MATISSE




Me llama la atención una exposición sobre Matisse y su deslumbramiento cuando visitó la Alhambra. Sus odaliscas posteriores, parece. Que ya es forma retorcida de mirar a los leones del patio homónimo. Claro que, también es sabido que los árabes se masturbaban mirando una celosía. No a su través, sino "con la celosía". Propiamente la celosía y su tirón sensual. O eso o verle el erotismo a un helecho en el Generalife. Su verde que te quiero verde. Es el problema de tener una iconografía pobre para el onanismo, que luego te pintan a Mahoma y piensas cosas raras, majete, Mustafá, golferas. Arriba, va una triste copia de una de las interfectas odaliscas de Matisse; abajo, la original. Las dos muy decorativas y tal. Con Matisse me pasa lo mismo que con Modigliani (vida apasionante aparte): que les ves uno de sus desnudos (muy reconocibles y muy personales y muy suyos de cada uno) y lo siguiente que te viene a la cabeza es ¿y?