sábado, 27 de noviembre de 2010

SI EL TAMAÑO NO IMPORTARA...


Primero fue el plátano. Luego la ocurrencia. Ya vale pintar comida sin ningún sentido. Miro la ensalada ahí abajo y es como si la hubiera pintado un loco. Muy zen y tal, pero como las maracas de Machín, que se las hacía con los dientes de las peleas que provocaba con sus boleros. Anda y que no ha habido muertos con "Dos Gardenias" o con "Madrecita del alma querida". Así me gustan las entradas, chavalote: coherentes y al grano. Por cierto, estoy por ponerle al plátano un tag de "erotismo" en lugar del de "comida". Ofrécese ilustración para revista gay o alrededores. Con estas manitas.