jueves, 16 de agosto de 2012

EL ÓVULO DE SAN PEDRO Y LA REGLA CRISTIANA

El Opus Dei tiene una universidad en la huerta de Murcia. Su director es un integrista de la Obra, un Kiko, un mulá fanático con catorce hijos. José Luis Mendoza. Consultor directo del Papa. Antes tuvo que huir a Santo Domingo y perderse en la selva para que en España no lo metieran preso por una estafa de unos setenta millones de pesetas. El colega, que iba de médico sin serlo, que iba de director de una institución homologada cuando lo que tenía era básicamente una empresa de fotocopias con tarima y pupitres,  expidió títulos falsos de enfermería y los cobró a precio de oro a cientos de murcianos incautos. El delito prescribió, claro, y el cristiano volvió a España a tirar de contactos para arramblar con unos terrenos del ejército por la vía de la recalificación y la intervención de su amiguito Aznar y montar otra empresa de fotocopias, ahora más gorda, con el beneplácito de la Iglesia. La Universidad Católica San Antonio de Murcia. La UCAM. Sacristías con profesores, agua bendita y obligación de impartir teología y ética en todas las carreras. También expiden títulos de medicina. Medicina Cristiana. Curas con fonendo, imagino. Una garantía. Con todo, carreras que cuestan una pasta y que al colega Mendoza, en binomio empresarial con su hermano, Los Mendoza (Murcia está acojonada con ellos), le han supuesto una fortuna personal que sigue oculta a los ojos de Hacienda. Que nadie toque a un tiparraco que ha llegado a "donar" a la Iglesia más de 8.000 millones de pesetas. El Óbolo de San Pedro, lo llaman. Yo a eso lo llamo recaudación, entrega y licencia para matar. Licencia para hacer y deshacer a cuenta todos los españoles (en principio, esos terrenos eran nuestros) y con el indiscutible pláceme de todos los políticos que le rodean. Sin ir más lejos, Josemari Aznar es doctor honoris causa por la capilla Corte Inglés de esta universidad. Buenos cristianos todos, menos el obispo Reig, que lo era de Cartagena y por querer meter la mano en el pan lo mandaron a Alcalá de Henares. El obispo de los "hombres oscuros y nocturnos". Qué nivel, Maribel, para que este año el mayordomo del Papa se robara uno de los cheques del neocatecúmeno. Una miseria de 100.000 euros. Para los pobres, dice el empresario, siempre sonriente. El cobrador de la cátedra. El recaudador íntimo del Papa con su boquita de piñón: "Aquí tienes lo tuyo, Susan". Si en esa casa roba hasta el mayordomo, ¿no será por lo que está cansado de ver hacer a los sinvergüenzas de los dueños? Qué ganas de gomitar con la Iglesia, con el Opus, con el cinismo y con los médicos tarados que salgan de ahí. Con dinero me hago yo piloto de cazas. Lo hablo con el Mendoza de Dios y este año saca un título sólo para mí. A tocateja. Para los pobres. Mi matrícula y cada año el Óvulo de San Pedro. Fecunda primera puta piedra de este putiferio mundial en toda regla. El Vaticano y sus palanganeros.