jueves, 11 de septiembre de 2008

PATO VERDE A JEFE AZUL



-Pato Verde a Jefe Azul, Pato Verde a Jefe Azul... Sí... Que se ponga el de logística... El de las coordenadas para la zona de descenso... ¿Es usted, sargento? Sí... Todavía bajando... Esto... Que quería decirle una cosita, hombre... Dos tontás que se me ocurren... A ver por donde empiezo... Sí... Su madre... Comencemos por su madre y hasta donde me dé tiempo, ¿de acuerdo? ¿Que estoy raro? Espere a verme raro... Eso, primero su madre, sargento. Su madre...

PAJARES NUNCA ESTUVO EN SUECIA

Años sesenta. Pajares, Esteso, Martínez Soria, Ozores y Landa predican impunemente el bulo de que las playas españolas estaban llenas de suecas desnudas. No era cierto, pero todos corrimos el hipotético riesgo de nacer de una sueca en una tontá de verano de nuestros padres. Esa fue nuestra guerra fría. Aquellas películas tan espantosas fueron la propaganda del gobierno. Afortunadamente yo nací de una malagueña. Pánico me da haber nacido de la de arriba. Mezclar la tentación del incesto y la imagen de Landa en calzoncillos debe de ser motivo de excomunión.

ÑA


El arte del rechazo, de la indiferencia elegante y del NO con alturas se llama ÑA, se pronuncia ÑA y se vive ÑA. Eso sí, ha de decirse con toda la boca abierta y en presencia siempre de algún SÍ por miedo, algún SÍ de rebaño, o algún SÍ de qué remedio. Sus efectos sobre la cabeza van desde una repentina ligereza en la frente hasta un súbito frescor de espumas recién salpicadas en el mascarón del hipotálamo. Muy recomendable el ÑA.