miércoles, 17 de junio de 2015

LOS LÍMITES DEL HUMOR, CON PERMISO DE MANEL FONTDEVILA



Valentín (mi ordenador) ha vuelto a petar. No puedo dibujar ni una colilla. Hasta que se remedie el enfermito veré cómo me las apaño, pero no quería dejar pasar ni un día más sin apoyar a Zapata: el HUMOR no tiene más límite que la risa. El humor es risa. Y nos podemos reír de cualquier cosa. Temblando de gozo o de terror. Risa nerviosa, histérica, plena, herida, rotunda, rastrera, volátil, suave, fuerte, negra, azul... RISA. Cualquier otra consideración para PERMITIR el humor es absurda: YA TE HAS REÍDO. No hay causa. Ni judíos, ni negros, ni atentados terroristas... YA TE HAS REÍDO. Lo otro es hipocresía, pazguatismo y los modales en la mesa de un caníbal. Absurdo PERMITIR o no PERMITIR lo que ya ha pasado. Inútil permitir que amanezca. Allá tú si ves que hay dolor en reírte de todas las malditas bombas del mundo o de la terrorífica incineración de seis millones de judíos. Sólo hay libertad. Y el ABSOLUTO. Allá tú si piensas que haces daño dentro del daño. Y no LIBERACIÓN. Ni todas las leyes del mundo juntas en un yunque del tamaño de un trasatlántico conseguirán aplastar la sonrisilla del que se sigue riendo por dentro del chiste más negro de la creación. Del chiste más negro de la materia oscura del ser humano. Porque somos eso. Esa sonrisilla de Epur si Muove, gilipollas del PP. Gilipollas chupacirios del mundo. La RISA es invencible. La RISA OS SUPERARÁ SIEMPRE.

Dos ejemplos. Dos intentos.

-¿En qué momento exacto se suicidó Hitler? Cuando leyó la factura del gas.

-¿Qué es lo que peor llevan los pederastas? Que se tienen que acostar muy pronto.


Si ya te has reído, aunque sólo sea una décima de segundo y por dentro, ahí tienes los límites del HUMOR. 
Luego, denuncia a este blog.

(Y gracias por la viñeta, Manel. Tú sí que sabes)