martes, 16 de octubre de 2012

UN PLANETA A JUEGO CON LAS CORTINAS

De jovenzuelo le tenía una gran tirria a los premios Planeta. Una tirria santa, casi por alusiones. ¡Acudid! ¡Socorro! ¡Han entrado los mercaderes en el templo y se han puesto a vender basura! Qué tiempos... Basura en el templo, sin caer en la cuenta de que los creyentes también eran basura. Y el Dios al que adoraban. Gente que compraba a precios abusivos fruslerías encuadernadas en cartón, simulacros de literatura cuando no, directamente, objetos librescos que regalar con la garantía de El Corte Inglés. Entonces estaba la firma vendedora en el ganador, el reclamo, y la supuesta calidad en el finalista, el ganador moral sin firma. Juá. Solían ser dos patatas sin discusión, carne de la Cuesta de Moyano y regüeldos en el Rastro. Sin embargo, la pasta del premio y la rimbombancia escaparatista llamaban la atención de los medios y durante un mes, más o menos, figuraban de Dostoievskys plumas magníficas como la de Carmen Posadas, Espido Freire, Fernando Schwartz, José María Mendiluce, Sánchez Dragó, Boris Izaguirre... Pero para ser justos también entraron en liza algunos escritores con la consigna de la peli de Woody Allen, "Toma el Dinero y Corre". Entre otros, Juan Marsé, Bryce Echenique, Vázquez Montalbán o Torrente Ballester. En estos días aciagos para la industria editorial, al papa(da) de Planeta, José Manuel Lara, le han crecido encima los enanos nacionalistas, que han comenzado a pegarle hachazos a su margen de beneficio empresarial por si, de repente, se encuentra con toda su producción deslocalizada y en un país odiado por España. A ver quién le iba a comprar entonces sus Terencis Moix, sus Rosas Regás, sus Marujas Torres o sus Marías de la Pau Janer... en polaco. El hombre está intentando solucionar el problema con dos pelotazos para el año que viene. Dos Best Sellers definitivos. Ya les ha encargado el trabajo a los autores que ganarán el Planeta del 2013. Las memorias noveladas de Belén Esteban con el título "¡¿¡Me entiendes!?!", firmadas por la mismísima protagonista, Princesa del Pueblo (negro contratado, Jaime de Peñafiel), y la autobiografía de Esperanza Aguirre con el título "Todos los Finales de Mes de mi Cuerpo" (negro gratis, Mario Vargas Llosa). Qué decir de los premios Planeta que dieron anoche, Lorenzo Silva y Mara Torres: que pobre Mara, la que le espera... Porque Lorenzo Silva es otro Trapiello, que no sé de dónde saca el tiempo para abundarse así de maravilloso y prescindible en todas partes. Salud a los dos para disfrutar de la pasta. Los compro y a la estantería que van, por orden alfabético. A Lorenzo lo pongo después de Lawrence Durrell y a Mara antes de Maupassant. En media hora los tengo a los dos en el suelo y con sendos ojos morados en sus respectivas solapas. Pobre Mara, la que le espera... Insisto. Con lo buena chica que es... O que era, que el Planeta endiosa que da asco. Mira Lucía Echevarría, que ya le llama de tú a Antonio Colinas.