martes, 15 de abril de 2008

PALOS (2)


Yo no huelo nada
Por el dinero no te preocupes
Con la gasolina que hay llegamos de sobra
Te va a doler un poco
Aquí somos todos muy amigos
Sólo es una manera de hablar
Será algún animal
Por probar no pasa nada
Hoy por ti, mañana por mí
Te gustarán mis colegas
Se te pasa con una aspirina
No parece muy profundo

CONFIANZA EN UN PAÍS


La confianza en tu país se mide en el momento en el que te toca beber agua del grifo a oscuras.

PALOS


No toquéis el botón rojo
El perro no hace nada
Tecnología alemana
Esa puerta no se cierra nunca
Son cuatro gotas
Váyase tranquilo
La semana que viene lo tienes
Ha cambiado mucho
Yo te aviso
No tiene pérdida
Todo es acostumbrarse
Nunca se les vio discutir
Vuelvo en cinco minutos
Mi padre fue un trabajador nato
El final no te lo esperas
¿Tienes un segundo?
No quema
La luz no tardará en volver

MI AGÜITA AMARILLA


Fastuoso, lo del trasvase del Ebro. Donde las dan, las toman. Aragoneses contra catalanes. Al enemigo, ni agua. Pero ojo, que Agustina "de Aragón" era de Tarragona. Así que basta con seguir el ciclo natural del agua, como cantaban los Toreros Muertos, para comprender que, tarde o temprano, los catalanes acabarán meándoles encima a los aragoneses. Y vuelta a empezar. Desálame esta escupidera, tú, que me estoy duchando con el ambientador del coche.

EL PANADERO CHEMA


Ha muerto el panadero del Barrio Sésamo español, Chema. Su mujer era la que estaba dentro de Espinete. En el imaginario de la época, mediados los ochenta, la caspa más nacional era representada por esos bodypuppets sin gracia y apenas guión. Visualmente, el único que se libraba era Don Pimpón (un granjero barbudo con pinta de fumado). Pero cualquier parecido con el Barrio Sésamo original era un accidente. Ahora recuerdo a la gallina Caponata. Uf. Al amigo Chema se lo ha llevado en volandas un cáncer fulminante en un mes. El teatro Tribueñe se ha quedado sin cabeza. Barrio Sésamo sin pan. ¿Se les ocurrió poner una panadería por lo de "sésamo"? Yo habría puesto un ladrón árabe retirado. Y a Espinete le habría obligado a escuchar a los Clash hasta provocarle una cirrosis. Con su paté le habría untado una tostada a Gracita Morales, el único y verdadero bodypuppet que ha producido la tele en España, Chiquito de la Calzada aparte. Mientras, que sigan vivos José Luis López Vázquez y Manuel Alexandre. Se acabó eso de sacarte en los monólogos con la dudosa procedencia de tus polvos blancos, Chema. Era harina. Que descanse en paz el hombre.