lunes, 12 de marzo de 2007

PATA DE BANCO (6)

Cierre manu militari de todos los museos de España. Muy pocos saben lo que hay dentro, pero las protestas serán abundantes y encendidas. Hacer una lista al óleo de los que más alto hablen de cultura y derechos ciudadanos. Luego, amenazar desde el F.C.P. (Falso Colectivo de Pirómanos) con meterle fuego a todos los establecimientos del Corte Inglés del país. Comparar ambas reacciones. Y en lo que respecta a Moneo, en las semillas de la pera no hay genética con tal desparpajo.


PATA DE BANCO (5)

Propuesta de cacheos intelectuales masivos en ciudades y pueblos a cargo de la Sección Cultural de la Guardia Civil. Penas de reclusión inmediata en severos colegios de reeducación para todo aquel que no sepa decir al menos un afluente del Ebro o el resultado aproximado de la batalla de Guadalete. Los ciudadanos que se nieguen al cacheo serán relegados a puestos directivos en empresas de comunicación, alcaldías y representación en el extranjero. Y en lo que respecta a lo que aprenden actualmente los niños en el colegio, en las semillas del pimiento no hay genética con tal desparpajo.

PATA DE BANCO (4)

Ante la llegada de un nuevo vástago a la Zarzuela, y por el bien de España, los príncipes deberían plantearse que el padrino fuera el terrorista De Juana Chaos. Una vez acogido en el seno de la Casa Real, a la gente le parecería todo de perlas y muy campechano, y se acabarían estos aires de preguerra civil. Si es niña, Juana; si es niño, Chaos, y a otra cosa mariposa. Y en lo que respecta a la independencia del País Vasco, en las semillas del pimiento no hay genética con tal desparpajo.


BUHARDILLA DE LAVAPIÉS (6)

Anoche empujé un par de millones de hijos dentro de una.
Era blanca, 35 años,
de nombre MI PADRE ME PEGABA MUCHO.

No respetó el orden.
Abrió primero sus piernas,
pero un hombresunhombre


antes que un poeta
ceremonioso.

Dentro de las manos,
invisible,
arde el fuego de humus
que sólo apagan las desnudas.


Con orden o sin orden.

Anoche paseé silbando por su cabeza.
No había el más leve soplo de aire allí dentro.
Lamenté haberle hablado de la Gran Barra.

Nos dimos los bajos, luego las espaldas,
y dormimos un sueño insolidario y laborioso.



Esas espaldas de las mujeres
que duermen de ti
haciéndose un ovillo de NO.

Hoy me hablará de lo bien.

Se despertará y me mirará y me recordará y me sonreirá.
La veré sonreír de ESA MANERA
y me hablará de lo bien.



Puto planeta desesperado.

Todo es una infancia mal apagada, madre.
No les culpes a los médicos
si ahora quieren llenarme la cabeza de cortafuegos.

PATA DE BANCO (3)

Sin hipocresías ni estúpidos golpes en el pecho, habría que darles inmediatamente a la Banca y a las Multinacionales el gobierno absoluto del país. Nos ahorraríamos el sueldo y las corrupciones de sus sicarios, los sinvergüenzas de los políticos (de derechas y de izquierdas), y las continuas sedaciones con la ideología, la libertad, los principios, los derechos, la división de poderes, la democracia y el Estado del Bienestar. Cuando a los tontos y a los esclavos se NOS llame tontos y esclavos directamente, sin disimulos, esto reventará higiénicamente por algún lado. Y en lo que respecta a la obra social de Caja Madrid, en las semillas del tomate no hay genética con tal desparpajo.


PATA DE BANCO (2)

Literariamente hablando, sólo valen las historias que entienda un niño entre cinco y diez años. Desde La Ilíada (te han quitado a la novia y vas a por ella) hasta el monólogo de Molly Bloom (mamá está tonta); desde el Quijote (cosas de la fiebre) hasta Crimen y Castigo (el alquiler). Así pues, y para evitar más mierda, a todos los editores, críticos literarios, asesores y escritores metaescritores habría que sustituirlos inmediatamente por una excursión de niños a por ranas. Y en lo que respecta a Carmen Balcells, en las semillas del tomate no hay genética con tal desparpajo.

PATA DE BANCO (1)

Las mujeres son hoy en día tan inteligentes y dirigen ya algunas empresas importantes gracias a haberse dejado invitar continuamente por los hombres desde hace miles de años. ¿Gracias sólo a eso? Y a que los hombres las prefieren en gran medida para practicar el sexo. Pese a tales logros (lo de las empresas o hablar sin faltas de ortografía), siguen siendo muy partidarias de dejarse invitar a todas horas y en cualquier circunstancia. En las semillas del tomate no hay genética con tal desparpajo.