domingo, 9 de junio de 2013

LAS MATRIMONIADAS DE LA LEY DE COSTAS


Federico Ramos de Armas podía haber sido secretario de estado de Defensa (ramos de armas, ramilletes de fusiles), pero es más colega del ministro Arias Cañete, así que le ha tocado "medio ambiente". No en balde (ni por el forro) estuvo ya en la consejería de medio ambiente de la Comunidad de Madrid, paradigma de la ecología patria, probablemente cambiando con una furgoneta por la noche los medidores de contaminación atmosférica por orden de esa otra gran ecologista (del pepino en la cara) y ex concejala de lo mismo en el ayuntamiento, Ana Botella. Pero de lo que más entiende Federico Ramos es de ladrillos, por supuesto. De inmobiliarias. De pelotazos en la construcción. Derecho, Económicas y Empresariales (Pontificia Comillas) para una meritoria carrera en el IVIMA y varias presidencias de consorcios urbanísticos. El Ecologista Definitivo e Ideal, pues, para hacerse cargo de una Ley de Costas a la medida de todos los amiguetes de la hostelería y de la construcción. Una Ley de Costas que ya la quisieran para sí los piratas de Maracaibo a la hora de hacer su paseo marítimo. Una ley de Costas que resucite a esos miles de hormigoneras que teníamos varadas en las playas como bígaros gigantes, un beso en la cara (de cemento), y otro en el rompeolas, como primer acuerdo matrimonial y boda playera entre el PP y todas las constructoras y todos los mangantes de este país hasta que la muerte los separe, o, dice la ley, al menos durante 75 años, qué más da. Así, amnistiando a los "tradicionales chiringuitos", amnistían a todos los mamotretos del litoral con padrino y vuelven a dar licencia de protección mafiosa a todos los proyectos de invasión marítima que quedaron aplazados por la crisis. Eso sí, para que el paripé ecologista funcione, se derribarán todas las casucas de los pescadores pobres. Las Baleares se salvan. Las Canarias no. Nivel de corrupción mediante, claro, que Matutes anda de por medio. Los surfistas del rodapié en plena faena y escuchando a la Oreja de Van Gogh por los cascos mientras se nos va a la mierda el litoral, por ley. Qué te esperabas de un gobierno a sueldo de los bancos más ladrones y estafadores que haya conocido este país en toda su historia, que ya es decir... ¿Un poco de disimulo, tal vez? Para qué. Les pone escupirnos a la cara. Se llama jerarquía. Una Ley de Costas de lo más ecologista para que no nos quepa ninguna duda de quiénes son los cerdos alfa. ¿O es que no sabemos ya a estas alturas de la pelea que los fascistas se vuelven más distendidos y sociables humillando a los pobres? Por eso ponen a explicarnos la nueva Ley de Trinque en el Litoral a uno con toda la cara de cemento y el rictus de "verás luego cuando les cuente a los míos el pinocho que le he largado  a estos gilipollas". Federico Ramos, el doble de David Venancio Muro, el de "Matrimoniadas". ¿Que no?


Una gracia... Las lunas de miel con las constructoras en Benidorm. Las bodas por lo civil con las cadenas de hoteles y los alcaldes "José Luis Moreno" del PP poniendo el sable para la tarta. Las risas enlatadas cuando el banquero que enciende la hormigonera dice la palabra "ecología"... Las Matrimoniadas con Abel Matutes en salto de cama. Qué patético todo... La misma gracia que les debe de estar haciendo esta mierda infame a las familias de Ojos de Garza... Ay, muyayos... Así le entre una medusa por el chocho a la jelecha del PP en su apartamento en decimocuarta primera línea de playa, en vertical. Y que venga un tsunami que sepa cargarse nada más que a los listos, o de secretario de estado p'arriba, también en vertical.