viernes, 17 de enero de 2014

AMANECE COMO PUEDAS


No quede este blog sin su homenaje al 25 aniversario del estreno de "Amanece que no es Poco". Uno de los títulos más inteligentes y consoladores que ha dado este país. Hace relativamente "poco" que se ha formado una asociación con sus admiradores. Los Amanecistas. Un nombre estupendo para una secta, que es en lo que nos acabaremos convirtiendo los que disfrutamos con amanecer a secas. Que no es poco en esta oscuridad de tiempos. Arriba, Luis Ciges, uno de los actores señeros de la película. "¿Me respetarás, hijo?" "¿Pero qué dice usted, padre?" "Calla, calla, que un hombre en la cama es un hombre en la cama". Brindo por José Luis Cuerda y por Germán, que trabajó en la peli (sí, sí, el "Ger" que de vez en cuando asoma y comenta). 25 años sin que haya aparecido una película del mismo fuste que "Amanece..." no da demasiados motivos para la esperanza, pero la hace aún más legendaria. Vaya una cosa por la susodicha y todos salimos ganando, que somos minoría étnica.

LOS PECADOS DE LA CARNE

Mucho bebercio para tan poco comercio. Así que aquí va un poco de carne, de la carpeta "Comida". Yo creo que esta manía por pintar carne hiperrealista me viene de alguna frustración de pequeño: no había rotulador marrón Carioca ni lápiz Alpino que le sacara el puntito de poco hecho a un buen filete de ternera. Así que supongo que de esos traumas, estos menús. No le deis un lápiz óptico a un desquiciado, que lo usará de varita mágica. Qué buenos recuerdos. Horas y horas ensimismado con los brillitos de la grasa, la fibra de la carne, la untuosidad del magro, el grosor, el calor de la plancha, el pan, el punto de asado de los pimientos, sus semillitas... Incluso he disfrutado con la cerámica de los platos o con la propia bandeja de corcho del chuletón fresco. Cuatro años ya de esa carne y como el primer día, oye. En otro momento podemos hablar de los platos de cuchara, pescados, ensaladas, postres y demás... ¡Mati! ¡Marchando esos dos filetitos otra vez!

(Ahora que veo los platos, me queda una espinita... en forma de patata frita: no consigo sacarlas jugosas, chico; me salen secas, duras, casi de bolsa; otra cosa es el huevo frito, que me salió de plancha, pero del que me resarcí con uno cojonudo, en sartén; lo recupero otro día, que no quiero aburrir y está llegando la hora del aperitivo)







HIPERREALISMO BEBIBLE


Sigo ordenando archivos JPEG. En la carpeta de "bebidas", algunos dibujos hiperrealistas de hace algún tiempo. Por seguir con el "pedo" de la entrada anterior. No sé si esto que hago (o que hice) tendrá alguna utilidad práctica algún día, pero y lo bien que me lo paso qué. ¡Germán! ¡Otro whiskito!






EL MEJOR PEDO DE LA HISTORIA DEL CINE


"The Wolf of Wall Street". La película de los chulos de puta de las agencias financieras norteamericanas, donde lo mismo te enseñan la mejor manera de vender un boli, que asistes a cuatro o cinco secuencias de las que te dejan completito. Cuatro, cinco o seis secuencias rodadas con genio, interpretadas con genio y resueltas con genio. Antológicas. Pienso en la entrada del prota en un chamizo de acciones a centavo. Pienso en la visita a su yate de los dos agentes del FBI. Pienso en la discusión en la cama entre el prota y su mujer. Pienso en algunas otras más, pero, sobre todo, estoy pensando en la secuencia del pedo de los dos barandas de la agencia. El prota y su colega. Dicaprio y Donnie Azoff. No sé cuánto pudo durar. Diez, quince, veinte minutos. La volveré a ver con toda seguridad. Se han rodado muchas secuencias de borracheras, pedos, flipes y delirios de los protagonistas, pero creo que estamos en presencia de la secuencia de subidón más divertida, brutal y estremecedora de la historia del cine. Con toda la película, una escena escrita por Terence Winter. Sí, las escenas como esa también hay que saber escribirlas. El mismo guionista de Los Soprano y Boardwalk Empire. Con toda la película, una escena dirigida por Martin Scorsese. Sí, las escenas como esa también hay que saber dirigirlas. El mismo director de Taxi Driver y ¡Jo, qué noche! Aunque sólo fuera por ella, a Leonardo Dicaprio deberían darle un manojillo de Oscars. Y a Scorsese un abrazo de una semana entera. Qué par de dos. De tres, con Azoff. No sé si está nominado, pero también un manojillo de Oscars y otro abrazo largo. Va a ser el primer pedo que se estudie en las escuelas de cine como si estuvieran en misa.