viernes, 22 de febrero de 2013

DESPUÉS DE UN INVIERNO MALO


En el cénit de mi cabreo he estado a punto de pintar a Adolfo Hitler sacándose muy sonriente el carnet del Partido Popular, pero me he dicho que a Hitler no lo habrían admitido en la calle Génova, pero no por genocida y tío loco, sino por pobre... Y también que qué culpa tendrán los Adolfos. Y he pensado en el mundo "Adolfo". En Adolfo Suárez, todavía vivo aunque sin nadie dentro. En Adolfo Bioy Casares, mucho más alto que Borges, con más vista y casi tan buen escritor como él. Y luego en Adolfo Marsillach, que me caía mal. Y en Adolfo Domínguez, que tiene tienda y firma, como el padre de Manolito, el de Mafalda. Pero el Adolfo que me estaba haciendo falta andaba camuflado. Fito. De Adol-fito Cabrales. Fito y su banda. Música. "No sé si el mundo está al revés o soy yo el que está boca abajo". Así que me he puesto a buscarlo por ahí hasta encontrar una foto buenísima (de Joan Enric), y le he hecho una caricatura. Tiene un montón de canciones cojonudas (qué buenos sus años en "Platero y Tú"), pero me voy a quedar con "Soldadito Marinero". Y buscando buscando por esos atestados tenderetes de Youtube he encontrado un vídeo delicioso con ese tema. Lo ha montado Zenodro 1000 y es tan literal, tan de cartilla Palau, que es la propia inocencia en imágenes. Un vídeoclip como para sordos. Braille para ciegos de la oreja. "Si no cierras los ojos, hay cosas que no se ven". Como que fue la canción con la que le dijo que no a la guerra de Aznar. En Madrid. Uno de Bilbao. Pudiendo haber nacido en Málaga... Pongo también la versión en directo, qué leches. La de la PUTA guerra. Los pelos de punta. Por no olvidar que son los mismos que ahora nos matan a nosotros. Y que una ola se lleve todo lo malo. Salud.